¿A qué está expuesto tu auto?

Te presentamos algunos de los agentes que dañan nuestro auto..

Lluvia ácida: La lluvia ácida daña principalmente los cristales del auto, son esas manchas de lluvia que se han secado en el parabrisas y que son muy difíciles de quitar con agua y jabón o con el lavado convencional. Remover la lluvia ácida requiere de productos especiales y gente profesional que sepa aplicar este tratamiento, pues de no aplicarse bien las manchas permanecerán.

Polvo: El polvo estático no se debe limpiar con franelas esto produce microrayones , lavarlo y secarlo con una  toalla de micro fibra es la forma recomendada.

Lodo: Al igual que el polvo este no debe removerse con las manos o franela alguna, se debe lavar el auto de preferencia con agua a presión, es muy probable que al terminar de lavar el vehículo aparezcan algunos  rayones generados por el lodo.

Sarro: El agua afecta la pintura de los autos, además de acelerar el procesos de corrosión de los metales el cual convierte el acero del automóvil en óxido de hierro. La corrosión no solo se limita al chasis y al bastidor del vehículo y a la pintura del auto.

Sol:  Es bien sabido que la exposición prolongada al sol no solo afecta al ser humano sino también a otros elementos como la pintura de tu auto, lo cual ocasiona que la pintura pierda su intensidad volviéndose opaca. No obstante esto nos es imposible tener siempre nuestro vehículo en la sombra de ahí la importancia de aplicarle alguna cera, sellador o cerámico que lo proteja contra los rayos solares (UV).

Viento: El viento es un transportador de polvo, partículas contaminantes y otros pequeños elementos sólidos que se incrustan en la superficie de tu auto creando la opacidad en la pintura y dañando plásticos y molduras. Este tipo de daño no lo podemos evitar.

Contaminación atmosférica: Esta contaminación también afecta  la superficie de tu auto, para prevenirla debes descontaminar y aplicarle cera, sellador, cerámico o algún coating de protección.

Heces de pájaros, excremento seco o de más de un día

Resina de arboles: Si dejaste tu vehículo bajo la sombra de un árbol es posible que éste haya liberado resina la cual fue a terminar en la superficie de tu auto, si es así, no intentes eliminarla rascando con cualquier objeto.

Insectos: Cuando los insectos se estrellan en tu parabrisas o en el frente de tu vehículo, desprenden diversas sustancias que se adhieren fuertemente a la superficie haciendo difícil su remoción. Estas sustancias pueden dejar mancha en tu pintura aun lavando el vehículo (al igual que las heces de ave).

Productos de baja calidad y malas técnicas de lavado: Adicionales a los problemas ambientales a lo que exponemos nuestro auto, los cuales no podemos evitar y solo queda protegerlos, están los problemas ocasionados por el uso de materiales de muy baja calidad y malas técnicas de lavado los cuales si podemos evitar.

Ten mucho cuidado a donde llevas a lavar tu auto o cómo lo lavas.